Civil Rights Defenders (CRD) nació en 1982 como parte de la ola de organizaciones no gubernamentales que surgieron gracias al Tratado de Helsinki para exigir el respeto y la garantía de los derechos humanos.
Como una organización independiente y experta en la defensa de los derechos civiles y políticos, Civil Rights Defenders trabaja con plataformas, organizaciones y liderazgos locales para fortalecer sus capacidades en la defensa de los derechos humanos, enfrentar los riesgos que implica su labor y hacer incidencia internacional. Civil Rights Defenders también monitorea al Estado sueco en esta materia.
La oficina central está ubicada en Estocolmo y la organización trabaja en el Sudeste Asiático, África Oriental, Medio Oriente, Europa, Eurasia y Latinoamérica (con una oficina ubicada en Bogotá, Colombia).
